El artista callejero “Combo” originario de París logro impactar al todos los transeúntes con esta obra.
Como todo artista callejero vivia la inquietante trajedia de que pintaran sobre su trabajo, (ya que no siempre se cuenta con el permiso del propietario) borrando lo que el había plasmado en el muro.
En la primer fotografia se mira en el muro pintado a tres grafiteros con las caras de los sobrinos del Pato Donald: Hugo, Paco y Luis, y al lado un hombre pintando sobre el grafiti, con un rodillo, y en la otra imagen se ve como el artista vuelve a plantar el grafiti en el muro, pero solo que ahora tambien incluye en su obra de arte a aquel que atento anteriormente contra ella.
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